La Luz Interior
4 de Agosto de 2023
Cuando Swami Kriyananda (pulsa aquí para ver el enlace en inglés) me dio el nombre espiritual Jyotish, dijo que significa “Luz Interior.” Ver la luz en la frente durante la meditación siempre ha sido la piedra angular de mi práctica, y probablemente por eso eligió este nombre para mí.
Yogananda explica que una de las enseñanzas ocultas del Bhagavad Gita (pulsa aquí para ver el enlace en inglés) es que cada personaje, bueno y malo, simboliza un rasgo psicológico de nuestra psique. Cada cualidad que expresamos en esta vida ha sido entrenada por el mismo maestro –Dronacharya (hábito pasado). Yogananda dice, “No importa cuántas veces un hombre sufra de ataques muy poderosos de hábitos de los sentidos y deseos materiales que producen inquietud, él descubre que los soldados ocultos nacidos de la meditación de esta vida y de vidas pasadas aún acuden en su ayuda.” Uno de los más grandes generales en la batalla espiritual es Dhumata (Calma Luz Interior), quien dispones nuestras facultades discriminativas puras para la batalla espiritual. Aunque el Gita en su superficie parce ser un mero discurso filosófico, cuando meditamos podemos experimentar las realidades que describe.
La mayoría de las personas, incluso los principiantes, pueden ver algún tipo de luz en la frente durante la meditación. Esto se debe a que la luz es un aspecto innato de nuestra esencia espiritual y se vuelve a despertar con cualquier esfuerzo espiritual.
Cuando su mente se vuelve muy calma y enfocada, la persona que medita puede ver el ojo espiritual como un anillo dorado que encierra un campo azul profundo con una estrella de cinco puntas de color blanco plateado en su centro. Ver claramente el ojo espiritual es un desafío, y mucha gente se desanima si no puede verlo. No te desanimes. Cualquier percepción de la luz interior, aunque sea solo como una especie de opalescencia efímera, es sumamente beneficiosa.
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La luz interior puede profundizar nuestra meditación (pulsa aquí para ver el enlace en inglés) de muchas maneras. Por lo general, comenzamos nuestra meditación orando a Dios y a nuestra línea de gurús. Desafortunadamente, esto a menudo se hace distraídamente. Será mucho más efectivo si primero tomas un momento para centrarte y conectar con la luz y la energía en el ojo espiritual. Luego, mientras oras, visualiza claramente a cada uno de los maestros, especialmente sus ojos. Esto añade todavía más poder si también sientes y diriges gratitud devocional a cada uno de ellos desde el corazón.
“Hazme Uno,” de Swami Kriyananda.
La luz interior puede profundizar nuestra meditación (pulsa aquí para ver el enlace en inglés) de muchas maneras. Por lo general, comenzamos nuestra meditación orando a Dios y a nuestra línea de gurús. Desafortunadamente, esto a menudo se hace distraídamente. Será mucho más efectivo si primero tomas un momento para centrarte y conectar con la luz y la energía en el ojo espiritual. Luego, mientras oras, visualiza claramente a cada uno de los maestros, especialmente sus ojos. Esto añade todavía más poder si también sientes y diriges gratitud devocional a cada uno de ellos desde el corazón.
Luego de tu oración (pulsa aquí para ver el enlace en inglés), pasa a la práctica de observar la respiración. Primero, siente las corrientes frías y cálidas de la inhalación y exhalación en lo alto del área nasal. A medida que te calmas y te enfocas más, siente que cada respiración está despertando y energizando la luz interior en tu frente y en la corteza prefrontal del cerebro.
Luego de que la luz interior se ha despertado, puede convertirse en una especie de “base de operaciones.” Cuando tu mente divague, llévala de nuevo a la luz interior. Para mí, esta es la mejor y más rápida cura para los pensamientos inquietos.
Cuando practiques otras técnicas, especialmente Kriya Yoga, usa la luz interior como punto de referencia, volviendo continuamente a él y fortaleciendo su poder. Al final de todas las técnicas, enfócate allí lo más profundamente posible. El ojo espiritual es la puerta a través de la cual la persona que medita con profundidad deja el cuerpo y entra en la consciencia Crística (pulsa aquí para ver el enlace en inglés), experimentando su unidad con todo lo que existe.
La luz interior también es útil durante todo el día. Swami Kriyananda aconsejaba que al relacionarnos con los demás, especialmente si estamos dando un consejo, deberíamos sentir amor y buena voluntad surgiendo en el corazón y siendo proyectados desde nuestra frente hacia el ojo espiritual de la otra persona. Esto nos conectará de alma a alma y hará posible una comunicación mucho más profunda.
De hecho, esta luz interior es uno de nuestros mayores aliados en nuestro viaje espiritual. En su gran libro de oraciones, Susurros de la Eternidad (pulsa aquí para ver el enlace en inglés), Yogananda escribió lo siguiente: “Mis ojos están cautivados, oh, Padre, con la belleza de las flores terrenales, con las escenas pasajeras de la vida, y con las nubes silenciosas que navegan. En todas partes, todo lo que veo insinúa Tu presencia oculta. Abre ese ojo en mí que solo te ve a Ti. Que con esa mirada pueda contemplarte por encima, por debajo, alrededor, dentro y fuera de mí. Enséñame a verte solo a Ti en todas las cosas. Abre en mí ese ojo que contempla en todos lados Tu maravilla oculta pero que siempre reina sutilmente.”
Además, sugiere, “Esta demanda, especialmente, debería repetirse mentalmente con profunda concentración hasta que el pensamiento-oración se fije en tu superconsciencia por la convicción nacida de una fe profunda.”
Que la luz interior nos guíe a cada uno de nosotros de regreso a nuestro único y verdadero hogar.
En la luz,
Nayaswami Jyotish
