23 de Agosto de 2019
Estamos en nuestra comunidad en Asís, Italia, participando en un curso de una semana de duración llamado “El Camino del Guerrero Espiritual.”
Devi y yo, así como otros oradores, hemos recurrido, en gran medida, a las explicaciones de Paramhansa Yogananda de las profundas enseñanzas del Bhagavad Gita. Esta escritura es una alegoría de la batalla entre nuestras tendencias del alma más elevadas y nuestras cualidades mundanas inferiores, impulsadas por el ego. Cada uno de nosotros, incitados por el deseo de reconectar con nuestro verdadero Ser, debe pelear esta batalla, y el sendero espiritual nos da las herramientas y el apoyo que necesitamos. (Pulsar para ver el curso online en español)
En la clase de esta mañana uno de los maestros usó un ejemplo espiritualmente rico, que me gustaría compartir contigo. Cuando estalló la Guerra Civil en Norteamérica, ningún bando estaba bien preparado. El presidente Abraham Lincoln, quien Yogananda dijo que había sido un yogui en una vida pasada, inmediatamente comenzó a buscar una estrategia exitosa. Él sabía que el ejército necesitaba desesperadamente tiempo para prepararse para la guerra, contra las fuerzas que trataban de dividir la Unión. Pensó profundamente acerca de lo que ya tenían, que podría usarse rápidamente. (Esta es una buena estrategia para tener en cuenta cuando enfrentamos cualquier desafío.)
Monumento a Lincoln en Washington, D.C.
Pronto se dio cuenta de que la fuerza naval del Norte era muy superior, y decidió imponer un bloqueo naval contra el Sur. Aunque las batallas se desarrollaban principalmente en tierra, un bloqueo naval, evitaría que el enemigo se reabasteciese de productos vitales. El efecto fue gradual, pero a lo largo de los cuatro años siguientes, el bloqueo lentamente ahogó su habilidad de estar en guerra, ya que las fuerzas Rebeldes gradualmente se quedaron sin equipo y provisiones.
Reutilicemos la estrategia del bloqueo de Lincoln para nuestra vida espiritual. Tomemos como ejemplo el centro del corazón, al chakra anajhat, que necesita volverse puro y lleno de devoción. En este momento, tiene una mezcla de sentimientos positivos y negativos, deseos y reacciones.
Construyamos un bloqueo para que la negatividad no se pueda reabastecer a sí misma. ¿Cómo? Tal vez cantando más, escuchando solo música que eleve y evitando influencias que produzcan reacciones negativas. Evite gente y ambientes que te lleve hacia abajo, y pasa tu tiempo libre en actividades que te eleven. Cuanto más riguroso sea tu bloqueo, más rápido se debilitará tu negatividad.
Para ganar la batalla de la vida, también debemos reabastecer nuestras fuerzas positivas tales como la devoción, la amabilidad, la meditación, y el servicio a los demás.
Otro ejemplo: Paramhansa Yogananda dijo que deberíamos esforzarnos por ser completamente “tranquilos y alegres.” En la pelea para ganar esta batalla podemos usar técnicas simples como un pranaiama (ejercicio de respiración), la tecnica de meditación Jong-So y los “Ejercicios de Energetización” de Yogananda. Estos pueden utilizarse no solo en el momento de la meditación, sino también durante el día.
Cuando necesites volver a centrarte y recuperar tu tranquilidad, tensa y relaja el cuerpo algunas veces, con respiracion doble. (Aprende gratis esta técnica) Practica esto antes de un encuentro difícil o una discusión anticipada. Cuando algo despierte tu respuesta de “lucha o huye,” trata de respirar para salir de ella en vez de pelear o huir. Si te estás confundido o deprimido, cinco minutos de Jong-So es la mejor cura.
Hay muchas variedades de bloqueos que podemos elegir, pero el principio central sigue siendo el mismo: bloquear lo negativo y reabastecer lo positivo. Puede tomar algo de tiempo, pero finalmente las fuerzas enemigas de la negatividad y la tristeza serán obligadas a rendirse.
En Dicha,
Nayaswami Jyotish
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