Me alegro de la buena fortuna de todos, incluso más que de la mía,
pues en mi alegría por ellos reside mi libertad interior.
Uno de los principios fundamentales de Ananda es: “Las personas son más importantes que las cosas”. Cuando actuamos con este principio en mente, naturalmente manifestamos una actitud de generosidad. Más allá de dar posesiones materiales, Swami Kriyananda escribe que es mucho más satisfactorio tener un espíritu generoso.
Si ves a alguien que necesita algo, ya sea dinero, una sonrisa o una mano amiga, trata de ver a la Madre Divina ofreciéndote la oportunidad de servir como un canal para Su amor divino. Jesús dijo: “Más bienaventurado es dar que recibir”. Al dar, te conviertes en un canal para el amor, la compasión y la bondad, y a medida que fluye a través de ti, eres bendecido.
Cuando damos a otros con el pensamiento de “Dios sirviendo a Dios”, purificamos nuestro dar. No hay separación; vemos a todos como parte de lo Divino. Todo lo que le damos a Dios, nos ha dicho Swami, vuelve a nosotros mil veces, de formas directas o, a menudo, más sutiles. Dale todo a Dios: no retengas nada. A través de la devoción y la entrega propia, finalmente encontraremos la expansión de nuestro ser interior hacia el Amor Divino, la Alegría y la Bienaventuranza: ¡libertad interior!
Paramhansa Yogananda compartió con nosotros: “Piensa en la Abundancia Divina como una lluvia poderosa y refrescante; cualquier receptáculo que tengas a mano lo recibirá. Si sostienes una taza de hojalata, recibirás solo esa cantidad. Si sostienes un cuenco, se llenará. ¿Qué tipo de receptáculo estás sosteniendo para la Abundancia Divina? Quizás tu recipiente esté defectuoso; si es así, debe repararse echando fuera todo temor, odio, duda y envidia. . . y luego depurado por las aguas purificadoras de paz, tranquilidad, devoción y amor. La Abundancia Divina sigue la ley del servicio y la generosidad. Dar y luego recibir. Dale al mundo lo mejor que tienes y lo mejor volverá a ti “.
Cada vez que damos y experimentamos el gozo expansivo de la generosidad, purificamos los receptáculos de nuestro corazón. Que tu espíritu generoso bendiga e inspire a otros y sirva para elevar la conciencia de este mundo.
Mensaje escrito por Gayatri Regester en nombre de todos los que sirven Ananda en el mundo.
