Que Se Haga Tu Voluntad

Que Se Haga Tu Voluntad

 2 de abril de 2021

Hoy es el aniversario de la crucifixión de Jesús, uno de los tres eventos centrales del cristianismo. Cualquiera que haya crecido como cristiano esta íntimamente familiarizado con la imagen de Jesús muriendo en la cruz. La Pascua, por supuesto, representa la resurrección y el triunfo de la vida sobre la muerte, del espíritu sobre el cuerpo.

Hay muchos aspectos de estos eventos, pero quiero hablar de uno en particular que es esencial para el progreso espiritual: la entrega profunda de la voluntad individual (ego) a la voluntad divina. En medio del drama del arresto, juicio, crucifixión, y resurrección, es fácil pasar por alto esta enseñanza atemporal, pero es imposible el verdadero progreso espiritual sin la auto entrega.

La Biblia nos dice que Jesús fue traicionado por su discípulo, Judas. Jesús, al ser omnisciente, sabía lo que iba a pasar. El oró, “Oh Padre mío, si es posible, que pase lejos de mi este cáliz, sin embargo, que se haga tu voluntad, no la mía.” Cuando los soldados llegaron para arrestarlo, Jesús dijo, “¿Piensan que no puedo orar ahora a mi Padre, y que él no me dará inmediatamente más de doce legiones de ángeles?”

 

 

 

 

 

 

La Piedad de Miguel Ángel (en la Basílica de San Pedro en el Vaticano).

Aquí hay una profunda lección para todos nosotros. No importa lo que venga a nosotros, bueno o malo, deberíamos entregarnos voluntariamente a la voluntad de Dios. En el caso de Jesús, esta entrega le permitió aliviar el karma de todo el mundo, y especialmente el de sus discípulos más cercanos. Nuestras vidas pueden ser menos dramáticas y trascendentes, pero la entrega a la voluntad de Dios es la mejor manera de neutralizar el karma que nos mantiene atados al engaño. La aceptación de la voluntad de Dios es demostrada por todos los grandes maestros. Aquí hay dos ejemplos fascinantes.

 

Una vez, Lahiri Mahasaya, regresando de su baño en el Ganges con un discípulo, le pidió que rasgase una tira de tela de su dhoti. El discípulo confundido no siguió el pedido de su maestro. Una cuadra después cayó un ladrillo de un techo y golpeó a Lahiri en el pie, provocando un tajo que sangró mucho. Lahiri rasgó con calma un pedazo de tela de su propia túnica y vendó su pie. El devoto asombrado preguntó, “¿Si sabías que iba a suceder, por qué simplemente no lo evitaste?” Lahiri respondió, “El karma necesitaba suceder, y si yo lo hubiese evitado, este hubiese tenido que regresar más tarde en una forma todavía más fuerte.” Una sabia enseñanza para nosotros cuando estamos dando vueltas tratando de escapar de una lección karmica.

Paramhansa Yogananda tenía muchas responsabilidades organizacionales, aunque él anhelaba pasar más tiempo en completa comunión con Dios. Una vez le oró a la Madre Divina para ser liberado de todas esas pesadas tareas. Su respuesta es tanto cómica como instructiva. Él escuchó la voz de Ella diciendo, “Tengo que ocuparme de todo el universo. ¿No puedes cuidar un pequeño rincón de este por Mí?” ¿Qué más pudo hacer sino arremangarse y volver a trabajar?

Entonces, para alcanzar la realización total, todos debemos sintonizar nuestra voluntad individual con la voluntad de Dios. Si Jesús hubiese tratado de evitar la cruz, podría haber tenido un final más feliz para su historia personal, pero no hubiese habido crucifixión, ni resurrección, y muy probablemente, tampoco cristianismo.

En entrega a Su voluntad,

Nayaswami Jyotish

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